El cahuín de la tarde. Todo comenzó cuando un facho de la jauría de José Antonio Kast, soltó una noticia imprecisa referente a Bárbara Figueroa. Claro, al hombre se le olvidó aclarar que la misma Bárbara había pedido el sumario por las irregularidades.
Ante eso, los mas incautos cayeron de inmediato. Lo imperdonable es que caiga alguien del currículum de la Soledad Alvear. Tale vez está senil, tal vez la pilló volando bajo, la cosa es que cayó:
Ante eso, la mismísima Bárbara la puso en su lugar:
Y luego la maravilla , la galera :


