
Texto del párrafo - 2
Úrsula González vivía días felices aquel 8 de diciembre de 2024. Se acercaban las vacaciones y la Navidad, tenía su árbol a medio armar y estaba llena de energía. Su hermana Vania, que fue a visitarla con su hijo, notó su entusiasmo. Durante el almuerzo, Úrsula compartió con su familia antes de salir con su pareja, José, hacia San Carlos de Purén para conmemorar a la Virgen.
Antes de partir, Vania le insistió en que llevara abrigo, pero Úrsula confiaba en regresar esa misma noche. En el camino, ambas se enviaban mensajes, y el último que recibió Vania fue cerca de las 17:30, cuando Úrsula avisó que llegarían tarde. Pasaron las horas y no hubo más respuestas. A la una de la madrugada, Vania despertó angustiada y a las seis de la mañana su madre le confirmó que su hermana no había vuelto.
Preocupada, Vania llamó a hospitales y a la pareja de Úrsula sin obtener noticias. Finalmente, un amigo le comunicó la peor noticia: Úrsula había fallecido en un accidente de tránsito. Su muerte fue provocada por Javiera Ruiz Freire, quien conducía ebria con 1.86 gramos por mil de alcohol en la sangre, sobrepasando el límite permitido por 1.06 gramos.
A pesar de la gravedad del hecho, la jueza Mery Ramírez Escalante rechazó la prisión preventiva para Javiera, argumentando que era una medida desproporcionada. La Corte de Apelaciones ratificó la decisión, dejándola con arresto domiciliario, lo que indignó a la familia de Úrsula.
Úrsula, de 42 años, era la tercera de cinco hermanos y la conciliadora de la familia. Profundamente religiosa y amante de los animales, dedicó parte de su vida a ayudar a otros y a la pintura. Sus obras están en la capilla de Adoración al Santísimo en Concepción, reflejando su gran talento artístico.
Su madre, con quien vivía desde la muerte de su padre, sufrió enormemente la pérdida. Desde el día del accidente, ha desarrollado problemas de salud, perdiendo la voz y la movilidad en algunos momentos. Para sobrellevar el dolor, mantiene las pertenencias de su hija intactas y le habla a su fotografía.
El día del accidente, Úrsula y José viajaban por la Ruta Q-61-R cuando fueron impactados por la camioneta de Javiera, quien, debido a su estado de ebriedad, invadió la pista contraria. José intentó esquivarla, pero no lo logró. Úrsula murió en el acto, mientras que él sufrió lesiones leves.
Testigos del accidente declararon que Javiera estaba fuera de control, gritaba que era funcionaria pública y exigía que no la tocaran. Se confirmó que era enfermera titulada en 2023. A pesar de los antecedentes, sigue sin cumplir prisión preventiva, dejando a la familia de Úrsula con un profundo sentimiento de injusticia.