En junio de 2022, un cliente de Copec publicó un video en redes sociales acusando a la empresa de “robar” combustible, alegando que la cantidad suministrada no correspondía con lo pagado. El video rápidamente se viralizó, generando diversas reacciones entre los usuarios.
Copec respondió aclarando que la discrepancia se debía a una confusión del cliente respecto a las leyes de física y química que afectan al combustible, como la expansión y contracción por temperatura, y no a una estafa o error en la medición de los surtidores.
Tras la explicación, el cliente fue objeto de burlas en redes sociales por su falta de conocimiento sobre el funcionamiento del combustible y las condiciones que pueden afectar su volumen, destacando la importancia de comprender estos factores antes de realizar acusaciones públicas.
Hoy, fue otro cliente quien se convirtió en tendencia, trasladando el debate del surtidor de bencina al freezer de los helados, dejando en evidencia que, una vez más, la física y las redes sociales no siempre van de la mano:
